Las empresas mineras no pagan impuestos
“Es fácil verificar que las empresas de
minería pagan la misma alícuota de ese impuesto (actualmente 35%)
que empresas de cualquier otro sector. La única diferencia en el caso de las
mineras, por la naturaleza riesgosa y de largo plazo de sus inversiones, es que
esa alícuota no puede ser modificada desde el inicio de un proyecto minero
durante 30 años. Esto es parte de la llamada estabilidad fiscal que rige para
cada proyecto.” afirmó Marcet.
La minería a cielo abierto está prohibida en el primer
mundo
“Es difícil dar con una estadística mundial pero es válido
decir que más del 90% de la minería mundial proviene de minas a cielo abierto.
El resto corresponde a minas subterráneas” indicó Marcet. Según el mito,“la
minería a cielo abierto arrasa sierras enteras y destruye ecosistemas en
cientos o miles de kilómetros a la redonda”. La realidad, por el contrario,
indica que en países de gran tradición minera como Australia y Estados Unidos,
“el área afectada por todas las operaciones mineras, históricas y actuales,
ocupa el 0,26% y el 0,40%, respectivamente, de la superficie de cada país.”
El mito indica que el primer mundo no hace minería a cielo
abierto, sin embargo, países de la envergadura de Australia, Canadá y Estados
Unidos “los tres países figuran entre los cinco mayores productores y
exportadores mundiales de casi todas las sustancias minerales comunes, desde
cobre, plata, uranio, níquel, oro y hierro, hasta bauxita, aluminio, azufre y
carbón. El método que predomina, por lejos, es la explotación a cielo abierto,
y una de las grandes ventajas de las minas a cielo abierto tiene que ver con
los trabajadores mineros. Generalmente es más seguro, saludable y agradable
trabajar en una mina a cielo abierto que en una subterránea.”